miércoles, 23 de octubre de 2019

Nuestra penosa realidad


El Ecuador continúa dividido por ambiciones e incomprensiones de comunidades indígenas, que representan el 7% de la población, políticos sociolistos del siglo XXI, revolucionarios de papel, trabajadores intolerantes, ciertos empresarios poco humanos; todos halan agua para sus molinos, no les importa el bien común.

La delincuencia y el desempleo aumentan, las ciudades son tierras de nadie, cada día se ve más pordioseros y drogadictos en las calles, que afean a nuestro bello país de mujeres bonitas, puertos, ríos, paisajes, deportistas pundonorosos, intelectuales esforzados, aunque sin ayuda.




La educación se desarrolla en el caos nacional: padres de familia y alumnos irrespetan a temerosos maestros que esperan ansiosos cumplir sesenta años de edad para jubilarse y así librarse de las pandillas que se forman en los planteles, como los Latin King, que pasan a integrar la guerrilla urbana dirigida desde la distancia por el Calígula refugiado en Bélgica.

El cartel del Calígula se asila cobardemente en embajadas o huye del país para no pagar sus penas por instigadores de la destrucción de bienes y ciudades.

La situación empeoró porque cada día hay más amenazas de paralizaciones violentas en este país politizado, donde todos hablan de política sin estar bien informados porque dan cabida a chismes y rumores.

Ahora los nuevos dueños del país son los indígenas y el Calígula prófugo, que secuestran a policías y periodistas, quieren sacar ministros, se burlan del presidente Moreno, quien promete más pronto que tarde entregar la lista de los contrabandistas de combustibles para la narcoguerrilla.

Nos hemos convertido en el país de la dimensión desconocida, donde todo es posible. ¿Hasta cuándo padre Almeida? Hasta que Dios se apiade y tomemos conciencia de aprovechar los grandes recursos naturales y aprendamos a dialogar y ceder por el bien del país.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Políticos herederos de la bicicleta de Eusebio

  Ciertos políticos ecuatorianos nos han traído a la memoria el recuerdo del infatigable y pintoresco personaje, Eusebio Macías Suárez, que ...